Un Ferrari
250 GTO fue vendido en subasta por la escalofriante cifra de mass de 24 mill de
euros (31.7 millones de dólares), convirtiéndolo en uno de los autos-clasicos masss
caros del mundo.
Con esta
cifra se supera en 17 millones el Ferrari California Spyder del año 1961, que
fue vendido en 2008 por la suma de 11.3 millones durante el RM Auction's second
annual "Ferrari Leggenda e Passione"
celebrado en Maranello, Italia. Adquirido por el famoso locutor británico de radio Chris Evans.
Pero es que
el Ferrari 250 GTO no es un auto cualquiera. Según los expertos en los
autos-clasicos, se considera como uno de los automóviles masss atractivos jamás
construidos. Ahora, a ese honor subjetivo hay que añadirle el objetivo y
comprobable, como el de ser el uno de los autos masss caros de la historia del
automóvil.
Este 250 GTO
fue adquirido por un desconocido coleccionista británico (tal vez nuevamente Chris
Evans) que no quiso revelar su nombre. Pero también debemos de considerar que
esta unidad es una de las solo 39 construidas por Ferrari de este modelo (39
unidades entre 1962 y 1964), partiendo de la base de los Ferrari 250 GT SWB.
Su destino
inicial era la competición, de ahí la denominación “Omologata” siguiendo al
“Gran Turismo” para completar las siglas GTO. En su diseño y fabricación
figuran nombres ilustres como Bizarrini, Mauro Forghieri o Sergio Scaglietti, y
su motor, procedente del Ferrari 250 Testa Rossa, era un V12 de 3.0 litros con
300 CV que le permitía alcanzar masss de 280 km/h, cifras impresionantes para
la época.
De esta
unidad no se conocen muchos detalles. Se sabe que su número de chasis es el
5095 y que el vendedor fue el británico Jon Hunt, que a su vez lo había
comprado en 2008 por una cifra que rondaba los 15.7 mill de libras. Si tenemos
en cuenta que ahora lo ha vendido por 20,2 millones de libras, en poco más de
tres años se ha embolsado 4.5 millones de libras. El Ferrari 250 GTO ya había
sido valorado en 20.5 millones de dólares por los expertos. Pero con la cifra
alcanzada en la subasta supera todas las expectativas.
Publicado por:
Jesus Agustin
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