Ferrari lanzó el 456 GT a mediados de los años 90, es el predecesor de los Ferrari 575 y el actual 599 GTB. Se trataba de un lujoso GT de dos puertas, con un motor V12 en posición delantera.
Un Ferrari en toda la extensión de la palabra, pero que nunca tuvo una opción descapotable, para desdicha de algún potencial comprador. Pero ello no quería decir que no se pudiese comprar con carrocería descapotable, sólo había que recurrir a un carrocero que emplea métodos artesanales en la creación de sus productos: Straman & Company.
Cuando se corta el techo de vehículos así el resultado final no suele ser muy satisfactorio, pero el Ferrari 456 GT Spyder no entra en ese grupo. Una bonita capota de lona oscura se pliega eléctricamente y se esconde en un cofre creado al efecto.
El resultado final es tan bueno que un profano lo confundiría con un producto Ferrari 100% genuino. Las plazas traseras siguen siendo muy amplias, pero quizá se echan de menos unos arcos antivuelco que podrían mejorar su apariencia. No sabemos si se ha reforzado el chasis, pero así debería ser para no perder rigidez torsional en las curvas.
Su motor 5.5 V12 con lubricación por cárter seco sigue siendo la misma fiera que cuando salió de Maranello. Con 442 CV de potencia a 6.250 rpm, acelera de 0 a 100 km/h en 5.3 segundos y alcanza una velocidad máxima de 298 km/h, datos casi calcados a la versión coupé.
Una de estas unidades está a la venta en California, Estados Unidos, por una suma de 94.500 dólares y todas las revisiones pulcramente pasadas. Como curiosidad, el polémico boxeador Mike Tyson compró un 456 Spyder, no sabemos si aún lo conserva en su poder.
Aún así no es el Ferrari 456 más exclusivo, ese sería el 456 GT Sedan, del que dos unidades fueron construidas por Pininfarina para el Sultán de Brunei. También se produjeron algunos 456 GT Venice, versiones familiares del 456 GT, también de manera artesanal bajo pedido.
Publicado por:
Enrico Sorgato
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